Info Adicional
El COLEGIO NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO de Granada se fundó con el propósito de educar de forma integral, o sea corporal, intelectual y espiritualmente, siguiendo los valores del Evangelio, a los alumnos que eligieran este Centro, sin ningún tipo de discriminación, y dando preferencia a las familias de alumnos más necesitadas.
Es Titular de este Centro la CONGREGACIÓN DE SANTO DOMINGO, fundada por la Madre Teresa Titos Garzón que nació en Granada en 1852,
mujer de noble corazón, generosa, alegre y compasiva, que vio en la educación una labor evangélica de primer orden porque, como ella expresaba, "las Hermanas que se dedican a la educación son auxiliadoras de Dios". También se entiende este concepto para los profesores y profesoras seglares que trabajan en el Colegio en comunión con nuestro IDEARIO.
Por tanto, a través de la educación de nuestros alumnos y alumnas, contribuimos a mejorar la sociedad del futuro, al formar a nuestros niños y jóvenes en los valores humanos y evangélicos que harán de ellos unas personas útiles, educadas y felices.
EL MODELO DE PERSONA, por tanto, que queremos formar en nuestro Centro, teniendo a Jesucristo como modelo y sentido último del hombre y del cosmos, tiene las siguientes características:
Constructora de su personalidad: se acepta a sí misma, acogedora, dialogante, con esperanza gozosa, sabiéndose responsable de su propia historia.
Abierta a Dios: vive en relación filial con Dios, amándolo y sintiéndose amada por Él; equilibrada y en armonía consigo misma, mejora la sociedad en la que vive y construye el Reino de Dios.
Abierta a los demás: acepta y respeta las diferencias, vive en solidaridad y servicio con los demás, y construye la fraternidad.
Abierta al mundo: participa activamente en la sociedad en la que se integra, como responsable de su transformación, comprometida con el bien común y con la conservación de la Naturaleza.
FINALIDADES EDUCATIVAS
La FINALIDAD fundamental de nuestra tarea educativa es lograr en nuestros alumnos el desarrollo integral y armónico de una personalidad cristiana, según el pensamiento de nuestra MADRE FUNDADORA: "A la cultura del entendimiento y del corazón hay que añadir la cultura artístico-técnica y una esmerada educación en la fe".
EDUCAMOS PARA:
- La responsabilidad personal, el sentido del deber y del trabajo como perfeccionamiento y realización de la propia persona.
- La verdad, como experiencia de autenticidad, y búsqueda objetiva y creativa de la explicación del misterio del hombre y de Dios.
- La libertad, como capacidad de autodeterminación a través de un proceso de progresiva liberación de los condicionamientos internos y externos.
- La justicia, la misericordia y la paz, tanto en las relaciones interpersonales como en las estructuras de la sociedad, que hacen posible la armonía consigo mismo y la convivencia entre los hombres, con espíritu abierto y dialogante, ajeno a toda forma de violencia.
- El respeto y la tolerancia, a todos los hombres, sin discriminación alguna, valorando su dignidad de hijos de Dios.
- El compromiso con la defensa de la vida, y con el cuidado, conservación y recreación de la naturaleza.
- La solidaridad y el servicio, compartiendo con el otro los bienes, valores, sufrimientos y esperanzas, y siendo sensibles a sus necesidades.
- La participación democrática, que capacita para el ejercicio responsable de los deberes y derechos cívicos.
- La promoción humana, orientada a la formación de profesionales comprometidos en la construcción de una sociedad más justa.
- La esperanza y la alegría, como experiencia gozosa de salvación, fomentando una visión positiva del hombre y de la historia.
- La interioridad y el silencio, como espacios que facilitan el encuentro consigo mismo y con Dios.
- El saber perdonarse y perdonar, como reconocimiento de los propios errores y la disculpa de la debilidad humana, que abre a la persona a la reconciliación con su historia personal, con los demás y con Dios.
- El amor cristiano, que da cohesión y profundidad a la vivencia de todos estos valores.